La ubicación es perfecta para explorar.

Una joya en el centro de Ibiza

La ubicación del hotel es inmejorable, a pocos pasos del centro histórico y con vistas encantadoras. El trato del personal fue cálido y amable, lo que hizo que nuestra estancia fuera acogedora.

Sin embargo, el check-in fue un tanto complicado, ya que la recepción cerraba durante algunas horas. Nos encontramos también con que la habitación era un poco pequeña y algo húmeda.

La ubicación es inmejorable, ideal para explorar.

Pasé dos noches y disfruté de las espectaculares vistas desde el restaurante, donde la cena fue realmente sabrosa. Sin embargo, el baño de mi habitación no estaba del todo limpio y el aire no circulaba bien, lo que hizo que la experiencia no fuera perfecta. Es un lugar adecuado para una estancia corta.

Nos atendieron muy bien al realizar la entrada y la habitación preciosa estaba lista al llegar. El servicio era cálido, además de ser un lugar ideal para estar cerca del centro.

Nada de nada.

La terraza en el tejado era simplemente espectacular, con plantas florecientes y cojines suaves que hacían sentir como si estuviera en un jardín encantado con vistas que dejaban a cualquiera sin aliento. Despertar aquí fue como abrir una ventana a un cuadro de Ibiza.

Algunas habitaciones pequeñas

La experiencia en el restaurante fue destacable, con platos como el solomillo y el crujiente de cordero que resultaron excepcionales. Las vistas desde el balcón fueron un gran atractivo, ofreciendo un panorama impresionante del puerto de Ibiza.

El baño de la habitación era bastante pequeño, lo que dificultaba un poco el movimiento. Además, las mesitas de noche eran incómodas, ya que no se abrían por falta de espacio. Es importante mencionar que, si planeas alquilar un auto, la dificultad para encontrar estacionamiento cercano puede ser un inconveniente, con el parking más próximo a 800 metros del hotel.

Ubicación excelente, cerca de todo. Habitación individual con cama muy cómoda y decoración encantadora. Atención del personal muy amable, siempre dispuestos a ayudar. El restaurante en el hotel ofrece platos deliciosos. Una experiencia auténtica y romántica en Ibiza.

La habitación tenía escaleras incómodas, pero el baño tenía agua caliente.

cerca de la historia, arte y relax en ibiza

Mi estancia fue muy agradable, ya que estaba a pocos pasos de la Esglesia de Sant Domingo y del Museo de Arte Contemporáneo, lo que me permitió explorar el centro de Ibiza con facilidad y disfrutar de un ambiente encantador. además, el personal es realmente amable y me hizo sentir como en casa a lo largo de mi visita, pero el baño de mi habitación podría haber sido más espacioso para mayor comodidad.

Ubicación increíble, a pasitos del centro, y el ambiente de la habitación bien acogedor. El desayuno chido y rico, perfecto para empezar el día. La atención de los anfitriones, de lujo, siempre atentos y con buena onda. Solo el Wi-Fi medio inestable, pero nada grave.

el baño era un poco oscuro (me hubiera gustado más luz). además, la decoración tiene un toque barroco que resulta interesante. la suite era amplia y acogedora, y con un buen wifi para trabajar (que a veces es complicado de encontrar).

la suite es super amplia y comfy, la deco un poco barroca pero chida, el wifi vuela y la tele está de lujo. la ubicación en el centro histórico es perfect, y el ambiente súper tranquilo, ideal para descansar. el staff es muy amable, especialmente julian que nos ayudó un montón con el aparcamiento.

las lámparas en el salón no funcionaban y la habitación era un tanto oscura. además, hay que subir escaleras sí o sí, no es ideal para mayores.